Me encantan los postres fríos, sobre todo los helados. De pequeña, congelaba los «petit suisse» con una cuchara clavada, también congelaba los zumos de frutas y hacía helados en un plis plas.
Ahora he cambiado el petit suisse por el yogur y he descubierto que la textura es deliciosa. Si además le pongo un toque especial, queda un postre de masterchef, fácil, original, fresquito y buenísimo. Perfecto para cualquier ocasión postre, merienda o para picar entre horas.
INGREDIENTES:
- Yogur griego azucarado ( le da más cremosidad y sabor que el normal, he probado con yogures griegos naturales o yogures normales y el que más me gusta es el griego azucarado)
- toppings:
- arándanos deshidratados o pasas
- pipas
- sal
* Estos toppings son los que probé yo y la verdad me quedó buenísimo, pero puedes hacer las combinaciones que más te gusten. Por ejemplo con pepitas de chocolate y frutas congeladas como fresones, frambuesas, moras… Pero no te olvides de añadir el toque de sal al final ya que es un contraste que gusta mucho.
PREPARACIÓN:
- Hacer espacio en tu congelador
- Colocar film transparente en una bandeja de plástico.
- Colocar cucharadas de yogur en la bandeja procurando que queden redondas y no se toquen entre sí.
- Decorar con arándanos, pipas y un pellizco de sal para contrastar.
- Meter en el congelador hasta que tome consistencia sólida.
- Levantar el film de la bandeja y separar los bocaditos a mano procurando que no se rompan.
- Servir inmediatamente y disfrutar.
*ojo: este postre se derrite muy rápido por eso hay que consumirlo inmediatamente.